Quería comentar esta obra de Bansky, grafitero conocido por todo el mundo; que alude a otra obra... en realidad a ninguna en concreto, lo interesante es que compara las pinturas rupestres, con el grafiti.
Arriba pues, vemos un hombre que pudiera ser el propietario de un comercio, o un empleado de servicio público, que puestas las orejeras, se dedica a borrar de la pared unas " pintadas ". En este caso vemos como " limpia " lo que parecen ser pinturas rupestres, muestras artísticas valiosísimas, no por su realismo ni por su rigor en la representación, sino por la fuerza y la pasión que transmiten, y por lo precario de su ejecución... Un paralelismo ovbio con el grafiti; pinturas en las paredes, por distintas razones, pero también precario, lleno de fuerza, y a juicio de Bansky tan valioso como éste.
Así y todo, aunque haya gente q no sepa apreciar el arte de los grafiteros, para la esperanza queda, el espíritu de éstos, que transmiten a sus obras, salvajes e irreductibles, como la bestia feroz que vemos abajo...
Me admira la obra de Bansky por la potencia de sus imágenes.
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